Si bien las Mipymes contribuyen con el 52% del PIB del país y generan el 73% del empleo, el camino que deben recorrer los emprendedores que lideran estas empresas no es fácil.
¿Cómo pueden ganar dinero los emprendedores en plena pandemia?
Con base en información de la Encuesta Telefónica de Ocupación y Empleo (ETOE) del INEGI, se puede inferir que en abril se perdieron 12.5 millones de empleos (10.4 millones informales y 2.1 millones formales), principalmente debido a los impactos económicos de la pandemia. Si bien estas cifras han mejorado durante los últimos meses, la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE) estima que el empleo se podría recuperar hasta finales de 2021. Ante este escenario, son muchas las personas que podrían emprender por necesidad para generar ingresos.
Si bien las micro, pequeñas y medianas empresas (Mipymes) contribuyen con el 52% del Producto Interno Bruto (PIB) del país y generan el 73% del empleo, el camino que deben recorrer los emprendedores que lideran estas empresas no es fácil.
Existe una gran cantidad de obstáculos y retos que se deben superar. De hecho, según el informe del Global Entrepreneurship Monitor, el 34% de los emprendedores considera el miedo al fracaso como un obstáculo para iniciar un negocio; lo que implica no sólo miedo a perder dinero, sino frustración personal, problemas de autoestima y hasta depresión.
Los emprendedores deben ser resilientes y tener múltiples habilidades que les permita superar cualquier obstáculo, por lo que conocer la experiencia de otros emprendedores siempre será relevante para quienes están por emprender. Es por ello que la Asociación de Emprendedores de México (ASEM), con el apoyo de Facebook, realizó un evento digital donde cinco mexicanos compartieron sus experiencias al emprender.
En el evento “Entre fundadores: convirtiendo los obstáculos en oportunidades», se presentaron Rigel Sotelo, fundador de Cal y Maíz; Mariana Torres, fundadora y directora general de Panalli; Fernando Aguilar, encargado de vinculación e impacto en Buna; Silke German, directora y fundadora de La Comandanta; y Omar Landa, fundador y director comercial de Rayito de Luna, quienes brindaron consejos a los nuevos emprendedores.
Entre los consejos que abordaron durante el evento, destacan:
Imagen: Danielle MacInnes vía Unsplash
Para ser emprendedor es necesario contar con una serie de habilidades y conocimientos; sin embargo, el hecho de no tenerlos no significa que no se puede emprender. No importa si se es ingeniero, físico, comunicólogo o chef, siempre hay un mercado que necesitará nuevas soluciones.
“Cada quien tiene una historia de vida diferente y no tenemos que haber estudiado una u otra cosa para terminar emprendiendo. Es la mezcla de habilidades que tenga cada uno de los socios y la diversidad en la forma de pensar, lo que favorecerá a la creación de propuesta de valor diferenciada y de alto impacto”, comentó Fernando Aguilar, encargado de vinculación e impacto en Buna.
La diferencia entre el fracaso y un error, es que el primero puede deberse a problemas ajenos, mientras que los errores siempre son responsabilidad nuestra. Y, aunque no es nada sencillo, asumir la responsabilidad que tenemos en ellos es el primer paso para evitarlos.
“Siempre habrá obstáculos, pero la idea es enfrentarlos con una sonrisa, verlos de manera objetiva y buscar una nueva solución a esos problemas sin tomarlos de forma personal y, sobre todo, aprender de estos para que no vuelvan a repetirse. Tienes que desarrollar la capacidad de resolver conflictos y sintetizar aprendizajes, y pensar qué puedes hacer por los demás y qué puedes hacer tú, pues, si no formas parte de la solución, nunca la vas a encontrar”, mencionó Mariana Torres, fundadora y directora general de Panalli.
Incluso los mercados más competitivos pueden ser una excelente opción si tenemos claro lo que queremos ofrecer y estamos convencidos de que nuestro producto es único en el mercado. Para lograrlo debemos conocer el mercado y ofrecer un concepto totalmente distinto al consumidor.
Así lo hizo Rayito de Luna, empresa de productos de higiene y cuidado personal. “Nos dimos cuenta de había buenas opciones trazables y honestas en alimentos, hasta en ropa, pero nos sorprendió que en otros que usas todos los días, como un jabón o un shampoo, sólo encontramos etiquetas que dicen orgánico, pero lees los ingredientes y contienen químicos sintéticos de alto impacto ambiental”, afirmó Omar Landa, socio y fundador de Rayito de Luna.
Su proceso de investigación sobre cómo opera la industria de la higiene lo llevó crear una línea de productos artesanales, sustentables y con empaques biodegradables que ha tenido una gran aceptación en el mercado.
Algunas personas pasan toda su vida sin darse cuenta de qué es lo más importante para ellas. Por esa razón se debe luchar por lo que queremos para hacerlo realidad. Emprender no se trata sólo de dinero, sino de libertad, pasión y sueños. Dicen por ahí que “si haces lo que te gusta, nunca tendrás que trabajar”.
«He estado muy involucrada en diferentes agencias de marketing y publicidad desarrollando grandes marcas, como Pepsi Co. y Kellogg’s, pero después de varios años la vida me sorprendió y me dio diabetes, entonces me comencé a cuestionar sobre lo que estaba haciendo. Desde entonces me di cuenta del papel que jugaban los productos en los niños, así que decidí crear mi propia marca, una que tiene los valores en los que yo realmente creo», explicó Silke German, directora y fundadora de La Comandanta.
Imagen: Hannah Busing vía Unsplash
Dependiendo del crecimiento de nuestra empresa, se presentarán situaciones que no podremos manejar por nosotros mismos, ya que requieren de un experto en un área en específico, como bien podría ser un contador o un abogado. En caso de no contar con ayuda, tendremos que contratar los servicios de esos expertos. Por otra parte, es importante colaborar o generar alianzas con personas que tengan habilidades diferentes a las nuestras y que se puedan complementar.
«Con el tiempo me he dado cuenta de que fui muy soberbio y muchas veces quise hacer las cosas solo, con lo cual no llegaría a ningún lado. Ahora estoy muy agradecido de haberme rodeado con gente que es muy buena y que tienen muchas habilidades que yo no, y con eso todo se puede hacer mucho más rápido y mejor», comentó Rigel Sotelo, fundador de Cal y Maíz.
Por: https://www.entrepreneur.com